Hoy en día, aquel concepto de que la historia es escrita por los vencedores, parece estar cerca de vislumbrar su final...eso al menos en la gran pantalla. La creatividad del hombre, la creencia en una razón totalizadora y dueña de la verdad absoluta, se evidencia más en crisis, en este mundo globalizado y post moderno del que ahora padecemos, y la creatividad del cineasta, parece ser la evidencia mas dura de esa realidad.
El cine comienza a mostrarnos varias caras de la moneda, en un mismo acontecimiento. Clint Eastwood buscó hacerlo con “Letters from Iwojima” y “Flags of our fathers”, que aunque mortalmente aburridas en momentos, en conjunto nos mostraron una batalla de Iwojima sin héroes y villanos, sin el cliché asqueroso del gringo que salva al mundo, frente el chino/japonés/ruso/etc. que es el “Bad Guy” al que hay que neutralizar, esquema que inundo el cine durante la Guerra Fría. Aunque con un poco mas de polémica, “Syriana” buscó explicarnos en una de sus subtramas, los argumentos del terrorista, ese que no viene de un Islam violento per se, sino de un país donde las elites usan la Fé como la mas sucia de las herramientas. El argumento bueno-malo, blanco-negro, parece estarse venciendo. Así, el cine estadounidense actual esta lleno de ejemplos como estos…”Fast Food Nation”, “The Chumscrubber”, “Thank you for Smoking”, parecen ser algunos de los ejemplos. Incluso, películas de hace bastante tiempo, parecen estar en la misma honda; toda la Saga de “Star Wars”, bien reflexionada, parece ser una crítica al Realismo Político, ese esquema de conducta del que Cheney, Lula y pare usted de contar, parecen disfrutar tanto (prometo profundizar en el asunto en un futuro post).
Europa parece ser otra fuente de este tipo de acontecimientos cinematográficos, que no sólo se centran en las relaciones entre los países en conflicto, sino que parecen estar en un intento de expiar las culpas de la propia historia. Sobre todo Alemania, parece enmarcarse en esto último, con “La Caída”, “Sophie Scholl” y “La vida de otros” (que me inspiro a escribir esto finalmente). Hitler ya no es más un parasito de la historia, venido del mismísimo infierno, sino un ser humano desequilibrado que se apoyo en la cruda realidad dejada por Versalles, para llevar a cabo sus igualmente desequilibrados planes. La Ley y el concepto transitorio de Nación, no son más justificación para violar el Derecho a la Vida, una de esas pocas verdades absolutas que deben sobrevivir a esta crisis de la modernidad. Los alemanes han sido capaces de aceptar que si, que se mataron entre ellos, que la Cortina de Hierro, no era una división entre buenos y malos, sino sólo entre modelos políticos.
El mundo desarrollado esta aceptando sus culpas, acabando con los conceptos “irrefutables” de su historia, con los iconos que viven vanagloriados en estatuas…¿podremos nosotros hacerlo?.
El día que seamos capaces de considerar que Bolívar (Dios Salve Oh a Nuestro Mesías y a su reencarnación llanera) posiblemente fue un traidor, capaz de entregar a un Miranda con algo de prestigio, y de asesinar a un Piar que obstaculizaba sus planes...El día que podamos debatir sobre Miranda, como un hombre, que se gozó Europa y capaz no hizo tanto como los libritos de historia (y el gobierno mesmo) parecen hacernos creer…el día que los argentinos hablen abiertamente acerca de que uno de sus presidentes (si, ese que esta en el billete de mas alta denominación) tal vez fue un genocida…el día que hablemos por igual de Pedro Escobar y la Seguridad Nacional, como del Viaducto Caracas-La Guaira, sin quitarle peso a ninguno…el día que no se enaltezca ni denigre al capitalismo…el día que los Colombianos puedan entender las fuentes de la hoy atroz guerrilla…el día que nos olvidemos de los grandes héroes, y veamos seres humanos con méritos…el día que nos olvidemos de que va a venir un Mesías a sacarnos de la pobreza…ese día….ese día, daremos un paso a entender que nuestra vida, que nuestra historia la construimos todos SIN EXCEPCION…ese día dejaremos de padecer la post modernidad...ese día, daremos un gran paso al progreso....
El cine comienza a mostrarnos varias caras de la moneda, en un mismo acontecimiento. Clint Eastwood buscó hacerlo con “Letters from Iwojima” y “Flags of our fathers”, que aunque mortalmente aburridas en momentos, en conjunto nos mostraron una batalla de Iwojima sin héroes y villanos, sin el cliché asqueroso del gringo que salva al mundo, frente el chino/japonés/ruso/etc. que es el “Bad Guy” al que hay que neutralizar, esquema que inundo el cine durante la Guerra Fría. Aunque con un poco mas de polémica, “Syriana” buscó explicarnos en una de sus subtramas, los argumentos del terrorista, ese que no viene de un Islam violento per se, sino de un país donde las elites usan la Fé como la mas sucia de las herramientas. El argumento bueno-malo, blanco-negro, parece estarse venciendo. Así, el cine estadounidense actual esta lleno de ejemplos como estos…”Fast Food Nation”, “The Chumscrubber”, “Thank you for Smoking”, parecen ser algunos de los ejemplos. Incluso, películas de hace bastante tiempo, parecen estar en la misma honda; toda la Saga de “Star Wars”, bien reflexionada, parece ser una crítica al Realismo Político, ese esquema de conducta del que Cheney, Lula y pare usted de contar, parecen disfrutar tanto (prometo profundizar en el asunto en un futuro post).
Europa parece ser otra fuente de este tipo de acontecimientos cinematográficos, que no sólo se centran en las relaciones entre los países en conflicto, sino que parecen estar en un intento de expiar las culpas de la propia historia. Sobre todo Alemania, parece enmarcarse en esto último, con “La Caída”, “Sophie Scholl” y “La vida de otros” (que me inspiro a escribir esto finalmente). Hitler ya no es más un parasito de la historia, venido del mismísimo infierno, sino un ser humano desequilibrado que se apoyo en la cruda realidad dejada por Versalles, para llevar a cabo sus igualmente desequilibrados planes. La Ley y el concepto transitorio de Nación, no son más justificación para violar el Derecho a la Vida, una de esas pocas verdades absolutas que deben sobrevivir a esta crisis de la modernidad. Los alemanes han sido capaces de aceptar que si, que se mataron entre ellos, que la Cortina de Hierro, no era una división entre buenos y malos, sino sólo entre modelos políticos.
El mundo desarrollado esta aceptando sus culpas, acabando con los conceptos “irrefutables” de su historia, con los iconos que viven vanagloriados en estatuas…¿podremos nosotros hacerlo?.
El día que seamos capaces de considerar que Bolívar (Dios Salve Oh a Nuestro Mesías y a su reencarnación llanera) posiblemente fue un traidor, capaz de entregar a un Miranda con algo de prestigio, y de asesinar a un Piar que obstaculizaba sus planes...El día que podamos debatir sobre Miranda, como un hombre, que se gozó Europa y capaz no hizo tanto como los libritos de historia (y el gobierno mesmo) parecen hacernos creer…el día que los argentinos hablen abiertamente acerca de que uno de sus presidentes (si, ese que esta en el billete de mas alta denominación) tal vez fue un genocida…el día que hablemos por igual de Pedro Escobar y la Seguridad Nacional, como del Viaducto Caracas-La Guaira, sin quitarle peso a ninguno…el día que no se enaltezca ni denigre al capitalismo…el día que los Colombianos puedan entender las fuentes de la hoy atroz guerrilla…el día que nos olvidemos de los grandes héroes, y veamos seres humanos con méritos…el día que nos olvidemos de que va a venir un Mesías a sacarnos de la pobreza…ese día….ese día, daremos un paso a entender que nuestra vida, que nuestra historia la construimos todos SIN EXCEPCION…ese día dejaremos de padecer la post modernidad...ese día, daremos un gran paso al progreso....
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